Harry rompe el silencio tras la investigación sobre Sentebale y lamenta que los más perjudicados sean los niños que ayuda la fundación.
El Príncipe Harry ha emitido un comunicado contundente y cargado de decepción tras publicarse los resultados de la investigación sobre su ONG Sentebale, que cofundó hace casi dos décadas junto a el príncipe Seeiso de Lesotho. Aunque la Comisión de Caridad del Reino Unido concluyó que no hubo acoso sistémico ni comportamiento indebido, el duque de Sussex dejó claro que las consecuencias del conflicto interno han sido devastadoras para quienes más necesitaban protección.
«Como era de esperar, la Comisión no encuentra ninguna falta por parte del cofundador y antiguo patrón, el príncipe Harry. Tampoco hallaron pruebas de acoso, misoginia o misoginia racial dentro de la organización, como falsamente alegó la actual presidenta», declaró el portavoz del príncipe a través de un comunicado recogido por People.
Sin embargo, añadió con tono crítico: «El informe es preocupantemente insuficiente en muchos aspectos, especialmente al no señalar que las consecuencias de las acciones de la actual presidenta no las sufrirá ella, sino los niños que dependen de Sentebale para sobrevivir».
El informe llega meses después de que Harry y Seeiso renunciaran como patronos de la ONG, acusando a la presidenta del consejo, Sophie Chandauka, de provocar un ambiente de trabajo insostenible y negarse a dimitir cuando los propios fideicomisarios se lo pidieron. La situación derivó en una ruptura institucional que arrastró también a los demás miembros del consejo.
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Crédito: Samir Hussein/WireImage.
Una fuente cercana a los fundadores afirmó: «Tanto Harry como Seeiso están devastados. Esta era su obra de vida. Fundaron Sentebale hace 19 años con dinero propio, trabajo y compromiso absoluto con las comunidades de Lesotho y Botsuana».
La Comisión, aunque no encontró pruebas de conducta inapropiada generalizada, sí criticó duramente a todas las partes por permitir que el conflicto se ventilara públicamente. También señaló fallos serios de gobernanza interna que dañaron la reputación de la organización y socavaron la confianza pública.
Mientras tanto, Chandauka agradeció a la Comisión por validar sus preocupaciones sobre la gobernanza y afirmó que la ONG saldrá «más fuerte y mejor dirigida». No obstante, su referencia final a los fundadores —“siempre estaremos inspirados por la visión de Harry y Seeiso y sus madres, Diana y Mamohato”— ha sido duramente criticada por personas cercanas al duque, calificándola de “oportunista y manipuladora”.
Harry, por su parte, mantiene su compromiso con las comunidades que inspiraron la creación de Sentebale. Según fuentes cercanas, el príncipe estudia crear una nueva organización o apoyar iniciativas existentes en Lesotho y Botsuana. “Es muy pronto, pero tiene claro que quiere seguir trabajando junto a Seeiso y cumplir la misión que los unió”, aseguran.
Aunque la investigación ha cerrado una etapa difícil, el daño reputacional a Sentebale parece ya irreversible. Lo que comenzó como una iniciativa inspirada por dos madres fallecidas —la princesa Diana y la reina Mamohato— hoy queda marcada por una crisis de liderazgo que amenaza con empañar un legado de casi veinte años.
