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La carrera de Andrea Trepat, reflejo de su pasión y evolución como actriz, se desvela en una charla con Xmag, desde sus inicios en teatro gestual hasta sus recientes éxitos.
La carrera de Andrea Trepat es un reflejo de la pasión, evolución y la dedicación al arte de la actuación. Cada paso, desde sus inicios formativos hasta sus más recientes éxitos, ha sido una pieza integral en la construcción de su identidad como actriz.
Andrea comenzó su viaje en el mundo del arte a través de la exploración del teatro gestual en Barcelona, donde se sumergió en una educación en la que también abrazó el texto y la danza, disciplina de la que se confiesa amante.
Su interés por ampliar horizontes también la llevó a formarse en Madrid y Estados Unidos, pero fue en Londres donde su carrera tomó un giro decisivo. “Me enfoqué en estudios orientados hacia el audiovisual en Metropolitan film school, donde conocí a Jeremy Stockwell, que se convirtió en una especie de mentor y coach laboral”. Confiesa que con él aprendió muchísimo de su profesión y que forjó una relación profesional muy especial.
Con las bases de su carrera asentada llegan los primeros papeles en series como ‘Zoo’ y ‘Esmessenda’, trabajos en los que comprende el funcionamiento interno de los rodajes y trabaja sólidamente su técnica como actriz. Sin embargo, es con su participación en el corto ‘Morir cada día’, que se estrena como protagonista en una película y se enamora del séptimo arte. “Aprendí sobre todo la diferencia entre la televisión y el cine, que principalmente veía que era un trabajo muy parecido, pero cambiaban los tiempos tanto de pre producción, como ya una vez en el rodaje. Y por supuesto de trabajar junto a actores con una larga trayectoría como Blanca Apilánez y Joaquin Climent. En cuánto a los reconocimientos sentí que me daban sostén y me impulsaban a seguir adelante con esta, tan inestable, carrera profesional que había elegido.”
Con cada nuevo proyecto, desde ‘Gran Hotel’ hasta ‘El Club de los Incomprendidos’, Andrea fue ganando visibilidad y se consolidó como una actriz destacada en nuestro país. Pero su participación en ‘Mar de plástico’ fue la que le presentó más desafíos a nivel profesional. Llegaba tras una exitosa primera temporada, que eso es algo que siempre causa un poco de nervios, más de los habituales, pero lo recuerda como una etapa muy feliz. “Disfruté muchísimo trabajar un personaje tan diferente a mí, más “extremo”, y con un background menos convencional”, comenta.
Pero si tras tantos años trabajando en la industria, a Andrea le quedaba algo por demostrar, la interpretación de Irina en ‘Caronte’ mostró su dedicación a su oficio, donde se sumergió en la cultura y acento ruso para dar vida a este personaje. Fue un proceso que implicó una profunda investigación y empaparse de referencias para forjar su acento más genuino.
Si después de este repaso a la carrera de la actriz te has quedado con ganas de más, no te pierdas su nueva serie ‘Reina Roja’, un thriller nada convencional basado en la saga de libros del mismo nombre del escritor Juan Gómez Jurado y que han sido todo un éxito a nivel mundial.
