Laura Pomares: belleza, pasión y compromiso social, así dirige su clínica Sain Clinics 

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Empresaria visionaria y madre de tres hijos, Laura Pomares redefine el mundo de la estética con Sain Clinics, priorizando el bienestar.

Laura Pomares siempre ha sido una apasionada del mundo de la belleza. Desde que era pequeña, su juguete favorito era un maletín de maquillaje, y esta inclinación temprana la llevó a seguir una trayectoria profesional en el cuidado personal y la estética. “Para estar bien con los demás, primero hay que sentirse bien con uno mismo”, comenta Laura, reflejando su filosofía de vida y trabajo.

A los 16 años, al no encontrar una carrera universitaria que le interesara, decidió hacer un máster en maquillaje y prótesis para televisión y cine. A los 17 años, ya estaba lanzándose al mundo empresarial con su primer negocio: dos cabinas de belleza en un club deportivo. Su espíritu emprendedor la llevó a ser parte de dos franquicias en el sector médico estético y cirugía plástica, una experiencia que la enriqueció tanto en lo que debía hacer como en lo que no.

Laura destaca un hito importante en su carrera: fue la primera persona en Europa en abrir una clínica de cirugía plástica dentro de un centro comercial, a pesar de las dudas de los demás. “Confié en mí misma y fue un éxito total”, recuerda. Sin embargo, su camino no estuvo exento de desafíos. En 2019, vendió sus cuatro clínicas a un fondo de inversión debido a diferencias en la filosofía de trabajo y se vio obligada a mantenerse fuera del sector durante dos años por un pacto de no competencia. Fue entonces cuando comenzó a trabajar en su propio proyecto, que culminó en la creación de Sain Clinics.

Cortesía de Sain Clinics

Sain Clinics se lanzó en el año 2021 con una estética y concepto únicos, ofreciendo a los pacientes una experiencia incomparable. “La primera clínica tenía 90 metros cuadrados, pero gracias a la gran acogida y éxito, en solo un año nos trasladamos a una sede en el barrio de Salamanca, Madrid, con más de 600 metros cuadrados”, comparte Laura.

Pomares reconoce que el camino empresarial está lleno de obstáculos, pero asegura que cada desafío es una oportunidad de aprendizaje. Solía frustrarse cuando las cosas no salían como quería, pero aprendió a ver el lado positivo y a entender que todo sucede por una razón. Una de sus frases motivadoras es “todo tiene solución y querer es poder”, algo que repite constantemente a su equipo.

Uno de los mayores obstáculos que enfrentó fue ser una mujer joven en un sector dominado por médicos experimentados. “Lidero un equipo de cirujanos plásticos y no fue fácil ganarme su confianza”, admite. Sin embargo, con perseverancia y visión, ha logrado posicionar a Sain Clinics entre las seis mejores clínicas de España.

Laura observó que muchas personas viajaban a otros países en busca de cirugía plástica, lo que la llevó a investigar y traer lo mejor de cada país a España, creando un concepto único. “La estética de Sain no tiene nada que ver con la típica clínica. Queremos que las personas sientan paz y tranquilidad desde el momento en que entran”, dice.

Actualmente, Sain Clinics está trabajando en un proyecto internacional y ya recibe pacientes de toda Europa. Aunque la idea de franquiciar Sain Clinics le resulta tentadora, Laura prefiere mantener el control para garantizar que se preserve la calidad y la filosofía de trabajo que ha instaurado.

Laura también es madre de tres hijos y asegura que la maternidad no ha sido un impedimento para perseguir sus sueños. “Nunca he dejado de trabajar y perseguir mis sueños. Mi familia siempre ha sido mi apoyo incondicional”, afirma. Los fines de semana y las vacaciones los dedica a sus hijos, y durante la semana se esfuerza por pasar tiempo de calidad con ellos.

En la clínica, se prioriza la salud y el bienestar de los pacientes. “Realizamos tratamientos y cirugías de forma saludable y con conciencia, no por moda”, enfatiza Laura. Además, subraya la importancia de la preparación antes de la cirugía y del cuidado postoperatorio, lo que contribuye significativamente a los resultados finales.

Cortesía de Sain Clinics

La empresaria también ha implementado programas de subvenciones para hacer que la cirugía sea más accesible a quienes lo necesitan. Este año, por ejemplo, realizará una cirugía corporal de forma solidaria a una mujer de Menorca, cubriendo todos los costos. En un esfuerzo por mejorar la calidad de vida de las personas, Laura lleva a cabo acciones filantrópicas en las que selecciona, a través de encuestas al azar, a personas que buscan un cambio significativo. La persona elegida recibe un tratamiento completo en su clínica de forma totalmente gratuita.

“Me encanta ayudar a otras personas a ser felices”, concluye Laura. Su dedicación a mejorar la vida de los demás, tanto a través de su trabajo en Sain Clinics como en sus esfuerzos solidarios, es un testimonio de su pasión y compromiso con la belleza y el bienestar integral.

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